Hace unos días mi amigo Jose (que ha hecho reforma en su casa) me encargó que si podría dar un cambio de aspecto a una mesa barnizada que ya no encajaba con la nueva decoración del salón. Cuando vi la mesa y sobre todo cuando pulí una zona, me di cuenta que tenia muy buena estructura y que la madera era de una calidad excelente para poder ser aprovechada y cambiar totalmente su aspecto y seigur formando parte de un nuevo entorno.
He pulido toda la superficie, he intentado sacar la beta de la madera sin llegar a dejar un aspecto demasiado envejecido, pero si lo suficientemente rústico como para estar en conjuntado con el resto de la decoración.
Se ha elegido un color nogal con un acabado en cera que ha quedado con el mismo tono del resto de las maderas del salón. Este ha sido el resultado, una mesa totalmente distinta en su aspecto.